Con el propósito de minimizar el uso fraudulento de las comunicaciones móviles, tales como extorsiones y otros delitos, el pasado 8 de septiembre, OSIPTEL, el regulador peruano de las telecomunicaciones dispuso la suspensión definitiva de servicios para más de 840,000 líneas celulares en las redes de los operadores. Dio a conocer que dichas líneas tenían como titulares a cerca de 22,300 personas y pertenecían todas al tipo prepago. Estas personas, con más de 10 líneas a su nombre cada una, nunca las validaron usando el Sistema de Verificación Biométrica de Huella Dactilar del RENIEC. Como sabemos, cada línea está asociada a una tarjeta SIM (Subscriber Identity Module) que conocemos con el nombre de “chip”. El OSIPTEL informó también que la mayoría de las líneas suspendidas (83%) estaban registradas en la empresa operadora Claro, mientras que a Entel, Telefónica y Bitel les correspondían 9%, 7.5% y 0.5% respectivamente. Si los titulares no cumplen con validar correctamente su identidad, las operadoras deberán dar de baja las líneas no validadas el próximo 8 de octubre. Esta medida está enmarcada dentro de un conjunto de acciones denominado “Apagón Telefónico” y se extenderá en una siguiente etapa a aquellos usuarios que tienen a su nombre entre 5 y 10 líneas prepago. El 23 de enero del 2017 se realizará la suspensión parcial de las líneas no validadas de estos abonados y el 7 de febrero la suspensión total.
Según el reporte de la UIT, este esfuerzo que realiza el Estado Peruano es comparable con los realizados por otros estados en el mundo, siempre con el objetivo de contribuir a mejorar la seguridad de las personas. UIT reporta, por ejemplo, que la Comisión de Comunicaciones de Nigeria (NCC) comenzó a registrar tarjetas SIM en 2011, para ayudar a resolver los crímenes cometidos con tarjetas SIM no registradas. El NCC ha multado recientemente a la empresa de telefonía móvil sudafricana MTN con cinco mil doscientos millones de dólares por no desconectar tarjetas SIM no registradas a finales de 2015, sanción que se hará efectiva en mil setecientos millones de dólares según resultados de una apelación del operador resuelta a principios de este mes.
Bangladesh, también según lo reporta la UIT, ha comenzado a desconectar unos 25 millones de tarjetas SIM no registradas en todo el país a raíz de una ampliación del plazo para el re-registro biométrico de tarjetas SIM desde el 31 de mayo de 2016. El Presidente de la Comisión Reguladora de Telecomunicaciones de Bangladesh, Shahjahan Mahmood, dijo a una audiencia de líderes de TIC que se reunieron en el reciente Simposio Mundial de la UIT para Organismos Reguladores (Egipto, 2016) “No estamos a salvo de los peligros que enfrenta cualquier otro país. Siendo cerca de 160 millones de personas en el nuestro, tenemos 133 millones de tarjetas SIM. Pero, sorprendentemente, muchas malas personas tienen un gran número de tarjetas SIM y las usan para hacer negocios ilegales, fraude, lavado de dinero y hasta terrorismo. Pensamos que la identificación de una persona y su correspondencia con una tarjeta SIM es muy importante”.
Otro caso visible es el del regulador tailandés NBTC, que desconectó de las redes de sus operadores a los clientes prepago que no habían registrado sus datos personales hasta el 31 de julio de 2015. Esta medida, que ya venía siendo implementada desde varios meses atrás, se hizo más intensa a raíz de un reciente ataque con una bomba casera detonada en Bangkok y donde la policía logró establecer que las coordinaciones entre los perpetradores se realizaron usando precisamente estas líneas fraudulentas, incluyendo la detonación remota del artefacto. La NBTC inicialmente había concedido una prórroga de un mes adicional a la expiración del plazo, y se consideraba una extensión de más de tres o cuatro meses. En ese momento, el regulador reveló que alrededor de 18 millones de números, incluyendo 5 millones que todavía estaban activos, fueron contemplados en la medida. Pero en agosto de 2015, una bomba fue detonada y dejó 20 muertos y 125 heridos, en lo que se cree que es un ataque por motivos políticos. Como consecuencia del ataque, la NBTC intensificó sus esfuerzos para hacer cumplir el plan de registro de SIM.
Según reporta la GSMA, el registro de tarjetas SIM prepago es obligatoria en varios países y exige que los consumidores presenten una prueba de identidad con el fin de activar y usar una tarjeta SIM en un dispositivo móvil. Varios estados han adoptado esta política como parte de los esfuerzos para ayudar a mitigar problemas de seguridad, de comportamiento criminal y antisocial. Hasta la fecha, sin embargo, no ha habido ninguna evidencia empírica de que la inscripción obligatoria de tarjetas SIM conduce directamente a una reducción de la delincuencia.
Pero cuando la medida es implementada de manera efectiva, teniendo en cuenta las circunstancias del mercado local, por ejemplo, la capacidad de los operadores de telefonía móvil para verificar, fidedignamente, los documentos de identidad de los abonados, el registro SIM puede permitir a muchos consumidores acceder a servicios móviles y digitales de valor añadido que de otro modo no estarían disponibles para ellos como usuarios no registrados. No obstante ello, es necesario señalar que si los requisitos de registro son desproporcionados en relación con el mercado específico, la política obligatoria puede excluir involuntariamente a consumidores vulnerables y en desventaja social contribuyendo así a acentuar las injustas brechas y desigualdades de nuestras sociedades. En tal sentido, la identificación por documentos oficiales, como el caso del DNI en el Perú o la identificación biométrica es una forma efectiva de materializar esa deseada correspondencia entre persona y SIM. Sin embargo, ya que aproximadamente mil quinientos millones de personas en todo el mundo no tienen ninguna forma de identificación oficial, la UIT reporta que una variedad de metodologías de registro están siendo consideradas antes de implementar el registro SIM, sobre todo en los mercados emergentes y de las naciones en vías de desarrollo.
Referencias
by
Tags:
Leave a Reply